miércoles, 26 de noviembre de 2014

NUTRIAS

Siempre da alegría encontrar unas bonitas huellas de nutria, y más sabiendo que hasta hace poco estuvieron bastante amenazadas y sus poblaciones decayeron. Las principales razones su persecución y el mal estado de los ríos y arroyos. Hoy por hoy dentro de lo que cabe se encuentran en mejor estado y muchos de nuestros ríos han vuelto a ser colonizados por estas.

Para muchos quizás, las huellas de nutria son relativamente fáciles de diferenciar, como estas que os muestro aquí abajo. Sus huellas digitales en forma de pica acompañada de reducidas uñas la delatan, y si ya marcan las membranas interdigitales para qué vamos hablar... Pero el problema está cuando las bonitas huellas de nutria no se marcan tan bien, como en la segunda foto que os muestro.


En esta segunda foto todavía hay detalles que nos hacen salir de dudas, como ese pequeño quinto dedo marcado. Pero en algunas ocasiones pueden no marcarlos, tampoco marcan uñas y sus almohadillas digitales, debido al terreno usualmente fangoso se expande y se redondea. Entonces tenemos una delicada tesitura, pues no es la primera vez que huellas de nutrias fueron dadas por huellas de nuestro más preciado felino, el lince ibérico. Sí, si se dan estas condiciones y los detalles tan característicos no se marcan bien, podrían confundirse con huellas de lince perfectamente. Por ello, cuando encontremos huellas dudosas de nutria que nos recuerden a las de lince, o la inversa, huellas de lince que nos recuerden a las de nutria, mejor fijarse en otras cercanas si es que las hay u otros indicios, y si no como me decía un amigo mío, ante una huella dudosa, mejor pegarle un pisotón...


Como siempre, gracias por vuestra visita.